El presidente del Puerto de Bilbao reivindica que "los puertos son y deben ser auténticas empre
Barkala cuestiona la efectividad de que todos los puertos se rijan por la misma regulación
El Puerto apuesta decididamente por su digitalización con tecnologías como blockchain y big data
En 2020 se cumplirán 150 años de la creación de Bergé en el entorno del Puerto de Bilbao
El presidente del Puerto de Bilbao, Ricardo Barkala, ha participado esta mañana en un desayuno informativo organizado por Executive Forum con la colaboración de Bergé. Durante el encuentro, que se ha celebrado en el Hotel Palace de Madrid, Barkala ha reflexionado acerca del funcionamiento y la gestión de los puertos como administraciones intervenidas en un entorno marcado por una necesaria y creciente competitividad.
Jaime Gorbeña, presidente de Bergé y Compañía, ha presentado al presidente del Puerto del Bilbao e introducido el evento. En 2020 se cumplirán 150 años de la creación de la compañía, cuyo nacimiento fue precisamente en el Puerto de Bilbao. Gorbeña ha reconocido la complejidad de gestión de este puerto que, como los demás, atraviesa tiempos disruptivos marcados por la transformación digital y por una mayor competitividad. Así, el presidente de Bergé ha invitado a los asistentes a “cuestionarse si hay que dejar de pensar en toneladas para comenzar a hablar de clientes, industria y competitividad”.
El presidente de la Autoridad Portuaria de Bilbao ha comenzado su intervención señalando una cuestión que, según ha reconocido, le llama especialmente la atención desde tomo posesión de su cargo hace ocho meses y que se refiere al planteamiento de si los puertos son auténticas empresas o, por el contrario, simples administraciones públicas. En este sentido, pese a que los puertos tendrían que responder a diferentes aspectos propios de la empresa (tales como la responsabilidad económico-financiera, la competitividad o la búsqueda de nuevos inversores, por ejemplo), no dejaría de ser una “administración intervenida”. Por tanto, Barkala se ha mostrado crítico con la rigidez de ciertos procesos y trámites burocráticos que limitan la autonomía funcional y gestora de los puertos, destacando que, al fin y al cabo, “los puertos son y deben ser auténticas empresas”.
Asimismo, el presidente ha invitado a otra interesante reflexión: ¿cómo es posible que todos los puertos se rijan por la misma regulación? “No puedo comprender que las reglas del juego sean las mismas parta todos los puertos” ha añadido, ya que cada puerto tendría una idiosincrasia y realidad propia, por lo que la existencia de una única normativa perjudicaría seriamente a la competitividad del sector portuario español.
Como respuesta a estas dos cuestiones básicas, Barkala ha manifestado que el Puerto de Bilbao ha presentado una serie de propuestas “motivadas, comprometidas y realistas” de mejora a Puertos del Estado. Entre ellas, ha destacado una real y efectiva autonomía funcional y de gestión para las autoridades para dar mejor servicio a sus clientes, una disciplinada autosuficiencia financiera y el papel coordinador (que no intervencionistas) de Puertos del Estado.
Con respecto al caso concreto del Puerto de Bilbao, su presidente ha reconocido que, aunque sus cuentas y datos actuales son muy positivos, “no nos podemos conformar ni distraer”. De este modo ha destacado la voluntad de seguir trabajado por ser más competitivos poniendo el foco en tres asuntos primordiales: la mejora y ampliación de las infraestructuras, la reducción de los costes directos, y la escucha y el “mimo” a los clientes. Además, entre los principales retos y desafíos que afronta se ha referido a la digitalización y transformación en un Puerto 4.0 (con la adoptación de tecnologías como blockchain y big data) y a la transición energética.